Desde que han comenzado la JMJ-C (Jornada Mundial de la Juventud, añado Católica, como he oído y leído en varios medios) me he mostrado respetuoso con ella. Me parece muy bien que la Iglesia, sus Obispos, el Papa, etc. exhiban sus creencias y su fe. Están en su derecho, faltaria más.
Lo que no me hace tanta gracia es que, como cualquier político, el Sr. Rouco Varela haga extensiva esa fe al resto de los españoles. Incluso a aquellos que no la profesan. Que defina España, y por ende a los españoles, a todos, como Cristianos y Católicos, no deja de ser una falacia. Quizá el se sienta mejor con esa idea y así justificar las ayudas que recibe la Iglesia Católica del Estado. No para las JMJ-C, que se supone que se sufragan por si mismas, pero si para el resto del año.
Da mucha pena ver a cientos de peregrinos por Madrid paseando junto a indigentes por la zona de Plaza de España. ¿Se parará alguno a ofrecerle comida? Esa es la doble moral que me subleva.
Pero claro siempre están los integristas que si criticas cualquier aspecto de estas jornadas te conviertes en un "perro-rabioso" de izquierdas. Cortos de miras.
Veremos
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